Feliz año nuevo
Bienaventurados aquellos que tengan un destino claro porque siempre alcanzarán sus metas. Y desventurados aquellos que no tengan un objetivo cierto, porque sabrán lo que es el infierno.
La vida es como manejar un auto al trabajo o la escuela en la hora pico. Es algo difícil de hacer, pero no titubeamos para hacerlo una y otra vez, día tras día. No importa lo planeada que tengan la ruta, nunca estarán seguros de que su plan lo podrán seguir. Deben estar dispuestos a cambiar de ruta si es necesario, siempre hay la posibilidad de que el camino que siempre siguen, esté interrumpido en algún punto de su ruta. Siempre deben estar dispuestos a descubrir una nueva forma de llegar a su destino.
Todo el tiempo deben pelear por cada metro del recorrido o no llegaran a tiempo. En todo momento existe la posibilidad de tener un incidente que no les permita llegar y porque no decirlo, existe el riesgo de tener un suceso que termine con su intento. Y aún así, recorren el camino día tras día y sin temor sabiendo que en el 99.9999% de los casos llegarán, sin mayor contratiempo, que un enojo porque alguien no los dejaba pasar.
Aún así, y a pesar de las dificultades en su larga ruta (vida), hoy han llegado hasta aquí. Lo importante en la vida es saber a dónde quieren llegar, que es lo que quieren conseguir, a quien quieren conquistar, o cualquier cosa que se propongan hacer. El camino para obtener su destino lo irán descubriendo andando el camino. Con esa certeza atrévanse a caminar, atrévanse a equivocarse y sigan avanzando hasta alcanzar su destino. Sabiendo que como el diario camino que recorren a su trabajo, a su casa o a donde se dirijan, llegaran prácticamente siempre, con el simple hecho de tener en mente el lugar a donde quieren llegar. Sin destino claro, no hay camino que valga la pena recorrer. Con una meta clara, siempre habrá una forma de llegar, sin importar los contratiempos.
Tengan un gesto amable con quienes han llegado hasta aquí, hasta el día de hoy con ustedes. Porque jamás estarán seguros de que la siguiente vez todos llegarán al mismo destino. Por eso mi gesto hoy con ustedes es desearles un buen camino a donde quiera que deseen llegar. Y decirles lo que una vez un maestro Lama me dijo: a partir de hoy estamos conectados, no significa que nos volveremos a ver, tampoco significa que no nos volveremos a ver, simplemente significa que si estamos hoy aquí, y eso es muestra de que nuestros destinos se han conectado de alguna forma, con un propósito particular y será emocionante descubrirlo juntos. Por ese simple hecho, hoy ha valido la pena encontrarnos.
Así que sin importar los destinos de cada quien, es un privilegio haberme encontrado aquí con ustedes y espero que el azar de la vida nos reúna nuevamente otro día, para poder decirles un "hola" a la manera elegante de JRR Tolkien en voz de su personaje Frodo: "Elen sila lúmenn' omentielmo" (una estrella brilla en la hora de nuestro encuentro).